domingo, 16 de noviembre de 2014

LA CANCHA DE SOFTBOL: UN INSULTO AL ÁMBITO DEPORTIVO


El softbol es un deporte muy dinámico, que desde su creación en 1887 cobro fuerza y se proyecto hacia la cima, al punto de formar parte de los juegos olímpicos de verano.
Por ser un deporte tan dinámico se ha extendido a diferentes partes del mundo, proporcionando una alternativa a diversos problemas de algunas comunidades. Se podría decir que sería el caso de San Marcos, un municipio de la costa Caribe de Colombia.
La llegada de este deporte fue algo innovador entre los habitantes del pueblo, ya que poco se sabía de esa disciplina y no se le daba mucha importancia ya que habían otros deportes mas arraigados.

Más aun el gobierno tomo cartas en el asunto, y viendo el gran futuro que podría tener el juego, se planifico la construcción de una cancha de softbol en la institución educativa San Marcos, que hasta hoy en día la conserva, aunque casi a rastras.

Algunos profesores como Franklin Hernández han visto al pasar de los años como algunos estudiantes se apasionan por este deporte, e inclusive lo toman como una opción de vocación por el resto de su vida. Esta es una idea gratificante, pero no correspondida, ya que son los mismos estudiantes los que poco a poco han ido descuidando el estado de esta cancha, que es para algunos un lugar de recreo u ocio, y para otros es un tesoro inolvidable de memorias y símbolo del futuro deportivo prometedor de San Marcos.

Al mismo tiempo que el olvido se va apoderando de esta estructura, otra serie de problemas se van acumulando como una bomba de tiempo, que incluso, si no se reacciona a tiempo, va a estallar encima de los mismo estudiantes, quienes lamentaran no haber apreciado lo que hoy por hoy es rescatable.

Todo esto lo digo con justificación, ya que no comprendo porque un lugar como ese esta en tan pésimas condiciones.

Con solo dar un primer vistazo se empiezan a denotar los incontables errores.

La infraestructura del lugar ha sido dañada, ya sea por el pesado oxido del tiempo, al igual que el decepcionante comportamiento de los estudiantes en el lugar. Acciones como trepar las mallas de protección ponen e riesgo la seguridad de  los estudiantes, u otras como lanzar objetos contundentes contra las bancas, que las agrietan y a parte de causar inseguridad produce incomodidad y mala presentación.

Para colmo de todo esto, los estudiantes solo empeoran la situación utilizando algunos lugares de la cancha para hacer sus necesidades, lo cual causa olores insoportables y nauseabundos. Aunque por otro lado, en el últimos caso la culpa no es completamente de los estudiantes, ya que lo baños también están en un estado deplorable, sumándose al cumulo de problemas sin solucionar en nuestra institución.

Pero, ¿Por qué se da todo esto?; si el colegio se lo propone, podría implementar jornadas intensivas de aseo, recaudación de fondos destinados a la reparación de la estructura, campañas de concientización con los estudiantes, charlas sobre el cuidado de la institución, multas por arrojar basura o cualquier otra actividad dañina o denigrante, entre otras posibles soluciones.

No me explico cual es el impedimento de todo esto. Tampoco culpo solo a las directas de la institución, ya que los estudiantes son parte del problema, pero pueden ser parte de la solución.

Todo esto debe ser una colaboración entre el gobierno, la institución, los estudiantes y los propios padres de familia ya que la formación de los valores comienza en el hogar.
Tal vez estos problemas sean insolubles y ya no haiga esperanza, pero en realidad hay que abrir los ojos, reaccionar, poner un alto a todo aquello que nos haga daño, poner de nuestra parte y empezar a demostrar que nuestra institución si vale la pena, y que lo que se está formando aquí es una generación de personas responsables y valientes, que afrontan sus problemas y obstáculos, y son capaces de ganar experiencia de ellos y dejarlos simplemente como hechos del pasado.

Pero para llegar a lo que queremos ser debemos empezar ¡YA! Con estar sentados y quejándonos no ganamos nada. Hay que actuar, y revelarnos ante la mediocridad, y comenzar con pequeñas acciones, como la restauración de la cancha de softbol para empezar a dejan huella, y darle una pequeña probada  a la vida y a su inmensidad de experiencias, ya que la vida se hizo para vivirla,  y el momento de tomar las riendas de tu propia conciencia y tu propio destino ¡Es ahora!.                  




Entrada general de la institucion



Estado de las bancas
Vista general de las gradas
Taquillera
Mallado


Vista general del desastre en la cancha

Camerinos

Los camerinos presentan inundaciones

Malesa en el campo sin control

Un mal aseo y pesima presentacion

Mallado que protege las gradas muy degradado 

Mallado dañado

Mal estado de las gradas

Mallado en pesimo estado



Vista general de la cancha de sofbol




Vista general del campo de juego






Los estudiantes demostrando su irresponsabilidad al rallar las paredes

Camerinos




El estado de los baños tambien es bastante deplorable, como se evidencia en estas fotos